Ya sé que desde todas las instituciones competentes, que desde las escuelas, los libros de texto y consultas médicas se está diciendo que el desayuno es la comidas más importante del día. Pues bien, es otra de las grandes mentiras de este siglo, levantarse y desayunar es nocivo para la salud y beneficioso para el empresario, el profesor, el médico, y sólo hace falta poner a funcionar un poquito la cabeza para darse cuenta y dejar el atocinamiento general que vivimos:
Una buena digestión para nuestro cuerpo es algo imprescindible para la correcta asimilación de nutrientes, no es una tarea fácil y gran parte de los recursos de nuestro organismo se vuelcan en esta costosa tarea, cuando por ejemplo, le pedimos a nuestro cuerpo que nos caliente porque además nos hemos metido en una piscina de agua fría, la sangre extra que estaba haciendo la digestión se va a calentarnos y se produce el corte de digestión; además que es necesario mantener limpia tus piscina para prevenir problemas de salud.
Ahora pensemos, ¿cuál es el mayor esfuerzo que tenemos que hacer a lo largo del día? despertarnos, que sí, que de verdad, que poner el cuerpo en funcionamiento es una tarea muy costosa para nuestro cuerpo, la respiración se acelera, la velocidad a la que trabaja el corazón aumenta, el cerebro, los músculos
¿alguien puede abrir un bote recién levantado? así que ¿pude haber algo más traumático para nuestro organismo que realizar dos tareas tan pesadas a la vez? ¿Por qué generar tanto estrés cuando se podrían hacer las cosas de otra forma? aquí está la respuesta:
Si yo me levanto, tomo un café, té, zumo o cualquier otra bebida ligerita que me aporte un poco de azúcar para darle al cuerpo la energía necesaria, hago todo lo que tengo que hacer en casa, llevo los niños al cole, empiezo a trabajar en la oficina, y la media mañana cuando mi cuerpo ya está 100% operativo y me demanda alimento me bajo 10 minutitos a tomar unos churritos o una pulga de chorizo, es decir algo de gasolina que no me obligue a una digestión pesada y a la hora de comer me voy a casa, como mi primero mi segundo y mi postre y me siento un ratito en el sofá para taparme con la mantita y ver el telediario para después volver a seguir trabajando, a mi cuerpo, a mi vida, a mis estado de ánimo le viene genial pero a los empresarios que como mucho me ha puesto cerca de mi puesto una máquina de café de asqueroso y otra de bollería llena de aceites hidrogenados para que no pierda nada, nada de tiempo?
Y qué pasa si mis hijos en vez de desayunar en casa sin hambre y con prisas a la hora del recreo se tomasen su bocadillo de jamón, pues que a su vida y a su organismo le vendría mejor y sus necesidades alimenticias estaría cubiertas en el momento justo, cuando ya se hubiera producido un desgaste de energía y una demanda de alimento, pero claro, igual necesitaba 15 minutos más de recreo, y además dependiendo de la edad de los niños, los profesores tendrían que estar pendientes de que el compañero, alérgico al gluten no mordiera de su bocadillo, total un trastornos.
¿Qué hacemos para no perder tiempo? desayunar en casa y joder el organismo, total, ya sabemos que países como eeuu al que le encanta desayunar son una primera potencia de ser obesos.